El plagio en Lucero
“Si robas a un autor, es plagio; si robas muchos, es investigación
Wilson Mizner (Guionista Norteamericano).
Wilson Mizner (Guionista Norteamericano).
La afirmación anterior llego a mí en la plena búsqueda de información acerca del plagio, confirma la urgente necesidad de circunspección respecto al tema, la importancia de establecer una reivindicación a la honestidad académica tan dañada y a la vez tan nombrada, en hacer un recuento de mi proceder anterior, así como la imperativa voluntad por redefinir mi vida académica, mi compromiso como investigador, como madre de familia y docente, por constituir una propuesta útil, basada en la experiencia puesto que se puede hacer uso de toda la información pertinente al tema, más es obligatorio citar a los autores en forma clara y correcta, con la finalidad desarrollar y profundizar en el tema de estudio.
El recuento
Manifestar las formas en que todos los textos que leí para este trabajo me influenciaron es de suma importancia, más como el ensayo es reflexivo, quiero empezarlo con la siguiente afirmación hecha por mi tutora Eugenia María Luisa Sánchez, del Módulo Prodeútico de esta Maestría, en un correo durante la sesión tres nos escribió: “Citen hasta el cansancio pues el conocimiento no nace de la nada” estas palabras me resultaron en verdad fuertes, aunque no tomaron sentido varias sesiones más adelante en donde las cosas se fueron clarificando, puesto que en el ejercicio diagnóstico no incluí ni una sola referencia, copie y pegue hasta el cansancio, referencié y parafrasee todo lo que pude respecto a mi tema, la verdad lo leo y me avergüenza, por lo que para el ensayo final intente ser muy rigurosa pues fue unos de mis principales retos, esto me hizo sentirme muy orgullosa pues había despertado en mí la conciencia del investigador responsable, al leer el texto “Plagio en el trabajo científico", de Raúl Rojas Soriano, me hizo reflexionar desde la perspectiva de un autor plagiado el impacto que tiene esta acción, así como la importancia que se le debe dar al citar y referenciar en forma correcta, estoy de acuerdo con él en que en las universidades no se ocupan de indicarles a sus alumnos de las dificultades que se les van a presentar por no hacerlo correctamente, pareciera que lo que se busca es solo concluir con un proceso rápido, sin preparación y mucho menos contar con el hecho de que se conciba la ética académica en sus vidas, evitar el plagio entres sus alumnos y proporcionarles matices a su educación. Lo anterior lo manifiesto en base a mi propia experiencia y a la de mis compañeros de generación, ya que durante mi vida universitaria jamás recibí la exigencia de aludir a los escritores que utilice, no tenía precedente alguno y al ser profesionista muchas veces utilicé referencias e hice citas textuales sin ocuparme del autor, no me justifico más es cierto mi desconocimiento a que estaba cometiendo un delito, situación que presumo sucede en muchos otros ámbitos; por todo lo anterior me identifique mucho con el caso que nombra de la Maestra ponente de tiempo completo en la UNAM de la que habla Rojas Soriano, pues consideraba necesario el usar fuentes y como esta en la RED pues no tiene dueño.
Aceptar que en muchas ocasiones hice uso inadecuado de la información no fue tarea sencilla, llamarse por el sinónimo de plagio es duro y al llegar la Guía APA a mis manos no le encontré ningún sentido, pues para una persona que nunca había referenciado solo fue un documento con información y muchas exigencias innecesarias e incomprensibles, fue hasta que leí el texto de “Aspectos éticos del plagio académico de los estudiantes Universitarios” de Héctor Cerezo Huerta y específicamente en la frase “Considérese al plagio como la acción de hacer pasar como nuestros, ideas o textos que pensaron otros y que nos fueron transmitidos por ellos, bien por escrito, bien oralmente o por algún otro mecanismo de comunicación”en donde mi propia imagen se destruyo he hice conciencia, refresqué memoria con las ocasiones en que incurrí en esta deplorable acción, sentí muy presente las veces en que plagie y la cara se me lleno de vergüenza, había usado todo, no solo escritores sino también a mis maestros, a mis padres, mis compañeros, sus palabras, sus estrategias, sus comentarios, todo, ese fue el momento, en que tome conciencia, tal vez a última hora, pero me llego la cordura.
Redefinir
Encontrarme de frente con semejante peso me obligo a reestructurar la forma en que me desenvolvía y me propuse a no hacerlo más, la verdad es que he tenido muchos apoyos además las tutoras, los compañeros de la Maestría las lecturas proporcionadas por el CECTE han sido la clave, es aquí donde encuentro concordancia con lo que dice Edgar Morín en “Los siete saberes necesarios para la educación del futuro,” pues además de ser la forma en que he obtenido conocimientos dentro de mi preparación, es la manera que pienso los docentes debemos instruir, “Educar para comprender las matemáticas o cualquier disciplina es una cosa, educar para la comprensión humana es otra; ahí se encuentra justamente la misión espiritual de la educación: enseñar la comprensión entre las personas como condición y garantía de la solidaridad intelectual y moral de la humanidad", la educación de un grupo de personas tiene que reunir además del qué se enseña, el cómo se enseña y justo esto es lo que hace la diferencia entre un individuo y otro, lo anterior me trae como referencia a Andy Hargreaves al decir que: “la buena enseñanza no es solo cuestión de ser eficiente, desarrollar competencias, dominar técnicas y poseer la clase de conocimientos correctos” me permito referenciarlo pues es necesario establecer un vínculo emocional con el alumno sustentado en la vocación apasionada de un docente de la que habla Hargreaves,6 si no existe un convencimiento real por parte del investigador que se traduzca en sus alumnos, el plagio se seguirá suscitando y cada vez con mayor incidencia.
En este párrafo en particular quiero referirme e invitarlos a que además de reflexionar sobre el tema principal de ensayo: El plagio, que piensen en la formación persuadida, la que nos indica que lo se aprende es por nuestro bien y que no se trata de transferir conocimientos sino de “Enseñar la comprensión entre las personas como condición y garantía de la solidaridad intelectual y moral de la humanidad comprensión”, a esto le llamaría ética y es la que compromete a cada ser humano a no romper las reglas que él por si solo se ha impuesto y por las que se decide vivir.
La propuesta útil
A título particular puntualizo que una persona cualquiera que sea su desarrollo profesional es la misma, por lo tanto sus acciones deben ser congruentes con su desempeño y sus pensamientos deben ser acordes con éstos, por lo que se exige una correspondencia entre lo personal y lo académico, por lo tanto descubro que al llegarme el discernimiento en mi ámbito familiar puntualizó con frecuencia a los miembros de mi familia acerca de la honestidad en sus acciones y palabras, en el uso de la información con las reservas adecuadas, a ser honestos con sus emociones describiéndolas en forma clara y objetiva, a lo que han reaccionado de manera óptima y ha mejorado la dinámica familiar. Por lo que respecta a mi ámbito profesional desde el semestre anterior les hice llegar a mis alumnos que actualmente cursan el Quinto Semestre de la Licenciatura en Educación Primaria de la Escuela Normal Colegio La Paz de Veracruz la guía APA, anterior a esto llevamos a cabo lecturas del plagio como la de Héctor Cerezo Huerta4 para puntualizar en forma clara las acciones y de esta manera clarificar dudas, realizar comentarios acordes a su desarrollo, con el propósito primordial de no esperar hasta el proceso de tesis a que se convierta en investigadores tenaces, pues entre más pronto les llegue el convencimiento más rápido se convertirán en respetuosos de su ética profesional. Durante el desarrollo de este escrito he nombrado mis cambios como investigador y es aquí en donde los invito a que elaboren la lista inmediata de referencias, es decir, al momento de realizar una búsqueda de información, no copiar y posteriormente volver a consultar, sino recuperar o capturar de inmediato las citas y referencias que se utilicen durante proceso de investigación, esto les permitirá ser mucho más claros y puntuales con ellas.
Quiero creer que tal vez si continuamos con una actividad de investigación responsable, basada en la ética, al pasar del tiempo renazca una nueva generación de investigadores tenaces pero honestos, ávidos de la información pero respetuosos de los investigadores, necesitados de informes, libros y artículos, más cuidadosos de su proceder, deseosos por intervenir en la historia de una averiguación, pero convencidos de sus acciones, grandilocuentes al referenciar y exactos al citar, actitudes que necesariamente convierten a una humanidad a la manera de San Pablo “Transformar una experiencia en conciencia, en esto estriba ser hombre”.
REFERENCIAS
Cerezo Huerta, Héctor (2006) “Aspectos éticos del plagio académico de los estudiantes universitarios”, Elementos No. 61, Vol. 13, p. 31. Consultado en abril 01, 2008 se accede con la liga: http://www.elementos.buap.mx/num61/htm/31.htm
Hargreaves, Andy (2003). "
Mizner, Wilson (2008). “Kaosmos” Consultado en Agosto 25, 2008 se accede con la liga: http://www.lacoctelera.com/xabier1964/categoria/frases-celebres
Morín, Edgar (UNESCO 1999). "Los siete saberes necesarios para la educación del futuro". Consultado en Agosto 27, 2008 se accede con la liga: http://www.udlap.mx/rsu/pdf/1/LosSieteSaberesNecesariosParaLaEdudelFuturo.pdf.
Rojas Soriano, Raúl (1992). "Plagio en el trabajo científico". Consultado en Agosto 20, 2008 de la página del CECTE se accede con la liga http://web.cecte.orbis.org.mx.
Sánchez, María Luisa “Sesión tres” Consultado en Agosto 25, 2008 de la página del CECTE se accede con la liga: http://web.cecte.orbis.org.mx
